lunes, 28 de diciembre de 2015

Lengua de signos para bebés [Vídeo]



La lengua de signos para bebés es una herramienta que nos permite comunicarnos con nuestros hijos desde mucho antes de que empiecen a decir sus primeras palabras. Miles de padres en todo el mundo están utilizando este sistema con niños a partir de los seis meses de edad.

En realidad prácticamente todos los padres del mundo utilizan los signos con sus bebés, sólo que de forma inconsciente y con muy poquitas palabras. ¿Quién no hace un gesto con las manos para decir "comer", "dormir" o "escuchar"? Con el método de la lengua de signos para bebés hacemos lo mismo pero de un modo intencional, repitiendo varias veces la palabra y el signo para que el niño lo comprenda y, en cuanto le sea posible, lo utilice para comunicarse con nosotros.



Ruth Cañadas, intérprete de lengua de signos, educadora infantil, doula y asesora de lactancia, imparte talleres sobre la lengua de signos para bebés en español y acaba de publicar el libro "Manos que cuentan". Después de asistir a uno de sus talleres decidimos comprar su libro y aprovechamos el encuentro para entrevistarla y que nos contara un poquito más sobre el libro y sobre el método. Para más información visita su web http://otanana.com/








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domingo, 27 de diciembre de 2015

Educando con valores, por Catalina López Zuluaga



Educando con valores




Cuando vemos grupos de niños en una fiesta de cumpleaños o en la escuela, frecuentemente algunos sueles destacar por algo que vas más allá del talento y la inteligencia, a todos nos encanta ese niño especial que saluda apropiadamente, el que comparte, el que no hace berrinches y el responsable, eso es porque podemos notar que el niño ha sido educado con valores.

Este tipo de educación nace en el entorno familiar, no podemos exigirle a los maestros que sean quienes se responsabilicen por ello, pues tienen a su cargo a más niños de los que pueden manejar, y a su vez los niños en dicho entorno no tienen un ejemplo claro a seguir, dejando que sean sus amigos quienes marquen los patrones.

Es en esos momentos cuando nuestros hijos empiezan a discernir entre el bien y el mal y tratan de forjar su propia personalidad, aquellos que tengan una base sólida en valores no sucumbirán a las malas tentaciones y serán personas de carácter más marcado, mientras que aquellos que no hayan sido educados con valores serán más propensos a saltarse las normas y a tener un comportamiento anarquista.

¿Cómo educar con valores a nuestros hijos?

Este tipo de educación debe comenzar desde la más temprana infancia, ya sea por medio del ejemplo o conduciendolos en cada situación por el camino correcto. Los niños deben comprender que los valores son algo de gran importancia, no se trata de seguir un juego.

Existen diferentes maneras de enseñar los valores, pero recomendamos que sea de manera seria, una cosa es ayudarse con herramientas infantiles como canciones y juegos para darles a entender el significado de la responsabilidad, la generosidad, el respeto, la honestidad y todos aquellos valores que queremos enseñarles, pero es muy diferente enseñarles cómo actuar en una situación en la que sean necesarios dichos valores.

Los padres que le dan gran importancia al comportamiento de sus hijos tienden a ser más observadores y saltan a la primera oportunidad que tengan para enseñarles a conducirse por el buen camino, y eso es estupendo, por ejemplo si observa que uno de sus hijos está haciendo un berrinche por la comida, puede actuar inmediatamente ya sea reprendiéndolo por su falta de respeto o por sus modales e inmediatamente darles el ejemplo correcto de cómo actuar, pidiendo por favor, dejando de llorar y gritar y esperando pacientemente.



La estrategia general es estar pendientes y no dejar pasar los malos comportamientos por más pequeños que parezcan en ese momento, puesto que aunque a nosotros nos parezca divertido que nuestra hija pequeña le pegue a su hermano mayor por tocar a su peluche favorito, estamos favoreciendo una conducta egoísta y hasta violenta, más tarde esa niña puede convertirse en una déspota poco humilde, lo mejor es reprenderla a tiempo y decirle que debe compartir con su hermano y que jamás debe pegarle a los demás, al mismo tiempo podemos aprovechar para decirle al niño que no debe tomar las cosas de otras personas sin su permiso.

Puedes incluso ponerlos a interactuar más profundamente el problema, ¿Qué tal si tu hermana te quita tu carrito preferido? ¿Te gustaría? O decirle a la niña ¿Te gustaría que te pegara cada vez que tomas mi celular? ¿O que nunca te lo prestara? Eso les dará que pensar y pronto, al ponerse en los zapatos de otro entenderán la importancia de tener un buen comportamiento.


Lo importante de cuando enseñamos con valores es explicar el porqué de cada cosa, si simplemente regañamos u obligamos a que se comporten de una u otra manera, no estamos sentando las bases para que puedan tomar una decisión correcta en el futuro.



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miércoles, 23 de diciembre de 2015

Cómo enseñar matemáticas y cómo enseñar a leer a tu bebé con el Método Doman [Vídeo]






Cuando mi hijo mayor tenía dos años leí los libros de Glenn Doman "Cómo multiplicar la inteligencia de tu bebé" y "Cómo enseñar a leer a tu bebé" y apliqué con él algunos de los programas del Método Doman (lectura, conocimientos enciclopédicos, música y excelencia física).

Ahora que mi hijo pequeño tiene 3 meses, estoy preparando ya los materiales para hacer los programas de lectura, matemáticas y conocimientos enciclopédicos. Os enseño cómo preparar los materiales en casa y algunos consejos básicos para seguir el método.


jueves, 3 de diciembre de 2015

Leemos en voz alta




Víctor tiene 2 meses y medio y desde que nació le leo cuentos en voz alta. ¿Por qué leer en voz alta a un bebé? 

Las ventajas son múltiples y ya hemos hablado de ellas en este blog.

Porque favorece el desarrollo sensorial y sienta las bases para el aprendizaje de la comunicación al exponer al bebé a los sonidos, las palabras, la entonación y, más adelante, también a las imágenes y a la palabra escrita. Uno podría pensar que no tiene sentido leerle a un bebé de sólo dos meses porque éste no va a entender nada de la historia. Pero no se trata de comprender la historia. Se trata de introducirle en el aprendizaje del lenguaje y de pasar juntos un rato agradable pues, aunque no entienda lo que oye, sí es fácilmente reconocible si se encuentra a gusto o no.

Leer en voz alta a un bebé es una primera aproximación a la lectura. Si se acostumbra a compartir este rato con nosotros a medida que vaya creciendo y desarrollando habilidades comenzará a interactuar. Por ejemplo, cogiendo el libro, señalando las imágenes, tratando de pasar la página y, un día, intentando leer por si mismo.

Pero además -o sobre todo- fortalece el vínculo afectivo. Así que os animo a leer en voz alta a vuestros bebés porque nunca es demasiado pronto para empezar. De hecho, nosotros empezamos ¡durante el embarazo!


Este mes estamos leyendo  Cuentos por teléfono, de Gianni Rodari. En este vídeo leo el cuento "Brif, braf, bruf":






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martes, 17 de noviembre de 2015

Aprender a leer con el Método Doman: ¿Cuántas sesiones?



Una de las cosas que me gustaron del Método Doman desde el principio es que el propio Glenn Doman explica detalladamente cómo llevarlo a cabo en casa. Incluso te anima a preparar tú misma los materiales. Es decir, que no trata de venderte nada. Ni materiales, no cursos, ni nada. Eso a mi me dio cierta confianza y por eso siempre recomiendo leer sus libros y luego ponerse manos a la obra.

Sin embargo, hay una cuestión importante que no está precisamente bien explicada en el libro "Cómo enseñar a leer a su bebé" y ésta es sobre el número de sesiones y cómo repartirlas a lo largo del día. Yo misma tuve que releerlo varias veces y confirmarlo con otras madres antes de comenzar. También es una de las consultas más frecuentes que llegan al mail de Tarkus Kids. Voy a exponer aquí un ejemplo de lo que Doman recomiendo y luego voy a explicar cómo lo hacía yo.

Empezaremos con sólo 5 palabras. Por ejemplo:
-Damián (el nombre de tu hijo, que en mi caso es Damián)
-mamá
-agua
-galleta
-pelota

Vamos a enseñarlas una vez, seguidas, mostrándolas sólo el tiempo que tardemos en pronunciar la palabra. Se tarda sólo unos segundos en hacer esto, así que es un ratito muy breve.


Víctor. 3,5 meses de edad.Esta fue su primera sesión del programa de lectura del Método Doman. Como veis dura tan sólo...
Posted by Tarkus Kids on Tuesday, January 5, 2016


Esto lo repetiremos tres veces a lo largo del primer día. Doman recomienda que las sesiones estén separadas al menos media hora entre si. Yo siempre las hice todas seguidas, porque normalmente pasábamos muchas horas fuera de casa y no habríamos tenido tiempo material de hacerlo tal como dice Doman en el libro.

El segundo día, enseñaremos el primer grupo de palabras y un nuevo grupo de 5 palabras más. Es decir:
-Damián 
-mamá
-agua
-galleta
-pelota

Y otro grupo de 5 palabras, por ejemplo:
-abuela
-gato
-parque
-pijama
-manzana

En teoría, según el libro, este segundo día vamos a hacer seis sesiones (tres con cada grupo de palabras). Yo lo que hacía eran 3 sesiones con las 10 palabras juntas.

El tercer día, repetimos lo mismo y añadimos otro grupo de 5 palabras nuevas, de modo que estamos enseñando 15 palabras y, en teoría, haciendo, nueve sesiones. Yo hice 3 sesiones de 15 palabras.

El cuarto día, repetimos los tres primeros grupos y añadimos uno nuevo. Por tanto, yo hice 3 sesiones de 20 palabras.

El quinto día, añadimos otras cinco palabras nuevas. Hice 3 sesiones de 25 palabras. Yo no sé si Doman realmente quería decir que hay que hacer 15 sesiones al día, porque si hay que dejar media hora entre sesión y sesión sería bastante difícil de organizar. Por eso yo siempre hice 3 sesiones diarias con las 25 palabras que correspondieran ese día. Algunas veces incluso llegué a hacer las 3 sesiones seguidas. Es decir, enseñaba las 25 palabras tres veces seguidas, aunque siempre alterando el orden.

¿Por qué? Porque hay algo más importante que las instrucciones del método, y esto es la filosofía que subyace. ¿Qué dice Glenn Doman?

Dice que hay que empezar "a una hora del día en que tu hijo esté receptivo, descansado y de buen humor". Así que ¿por qué no aprovechar un momento así y hacer todas  las sesiones de golpe? Sólo se tardan unos minutos y se aprovecha mejor el tiempo.

Y también dice que nunca hay que aburrir al niño. "El único signo de aviso en todo el proceso de aprendizaje de la lectura es el aburrimiento". Si esto tiene que ser divertido, tal vez nos convenga olvidarnos del método.




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domingo, 15 de noviembre de 2015

¿Cómo es un bebé de dos meses? - Desarrollo de Víctor


En este vídeo explico el desarrollo de Víctor en sus dos primeros meses de vida: hábitos de sueño, alimentación, porteo, comunicación etc. En próximo vídeos enseñaremos cómo usamos la lengua de signos y cómo hacemos los programas del Método Doman con él.

Para saber más sobre los programas de estimulación visual y aprendizaje de la lectura del Método Doman visita http://www.tarkuskids.com

Para saber más sobre lengua de signos para bebés visita http://otanana.com


Para saber más sobre porteo visita https://www.crianzanatural.com




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jueves, 12 de noviembre de 2015

La revolución pacífica





[Boletín Tarkus Kids de 3 abril 2014]



Glenn Doman lo llamó "La revolución pacífica" y definió así su objetivo:

"otorgar a todos los padres los conocimientos necesarios para tener unos hijos muy inteligentes, extremadamente capacitados y deliciosos, y crear con ello un mundo muy humano, cuerdo e íntegro."

Tenía razón en que una revolución así está en manos de los padres y de las madres. Sólo ellos pueden asumir la tarea de criar a sus hijos para que sean buenos e inteligentes. Es difícil imaginar una manera mejor -y más pacífica- de cambiar el mundo para hacerlo mejor.

A todos los niños les gusta aprender. Esto es un hecho. Los bebés nacen especialmente diseñados para aprender todo cuanto sea posible acerca del entorno en el que viven. Disponen de cinco herramientas básicas que llamamos "sentidos". Los niños exploran, observan, imitan y analizan. Depende de nosotros que dispongan del tiempo y de la libertad necesarios para hacerlo. Podemos ayudarles poniendo a su disposición toda la belleza del mundo y, mientras lo hacemos, estrechamos nuestro vínculo con ellos. ¡Todo son ventajas!

Si tú también quieres formar parte de la Revolución Pacífica, no dejes de leer los libros de Glenn Doman. Después, puedes echar un vistazo a nuestro blog donde encontrarás materiales descargables y también algunos tips para aplicar el método, basados en mi propia experiencia con mi hijo y en comentarios de los lectores de Tarkus Kids. Te invito a que después también compartas tu experiencia escribiendo a lau@tarkuskids.com o uniéndote a nuestra comunidad en la red social Facebook

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martes, 30 de junio de 2015

Cómo enseñé a mi hijo a leer, por Viviana




Viviana es seguidora de Tarkus Kids prácticamente desde el principio. Esta semana se ha animado a compartir su testimonio con nosotros porque está convencida de que puede ser de ayuda para otras familias. Reproduzco su mensaje:


"Hola Lau.

Te escribo para contarte mi experiencia con la lectura para que puedas compartirlo en tu blog. Cuando yo conocí el método Doman lo que más me convenció fue leer testimonios de otras familias así que pienso que ahora me toca a mi compartirlo.

Cuando J. tenía un año comenzamos el programa de lectura. Miraba las tarjetas fascinado pero nunca daba ninguna señal de reconocer las palabras. Decidí seguir porque Doman siempre dice que no hay que examinarlos y que lo importante es la creación de conexiones neuronales y no tanto si aprenden o no a leer.

Unos seis meses después empezamos el programa de conocimientos enciclopédicos. Le enseñamos animales, banderas, esculturas, monumentos y muchas otras cosas. Tal vez porque en este programa había imágenes y en el de lectura no hay J. empezó a reaccionar y a señalar las cosas que conocía.

La fase final fue de libros que hicimos a mano con fotos suyas (esta idea la copié de tu blog). Después de completar los dos programas empezamos a poner letras a su alcance: imantadas en la puerta de la nevera, de cartón en las paredes, de madera para jugar con ellas, etc. Y empezó a formar palabras sencillas, como su nombre, "mamá", "agua" y otras palabras cortas y conocidas.

A los cinco años entró a la escuela y las profesoras nos preguntaron cómo lo habíamos hecho, que cómo era posible que leyera tan bien a esa edad y sin que nadie le hubiera enseñado. Les dijimos que en realidad sí le habíamos enseñado pero de esa forma. Simplemente como un juego.

Recomiendo a todas las madres que lo prueben y que no se agobien si no pueden seguir las instrucciones al pie de la letra porque eso es lo de menos.

Gracias por toda la información que compartes.

V."




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miércoles, 13 de mayo de 2015

Estimulación temprana en el día a día



[Boletín Tarkus Kids de abril 2015]



Para estimular a nuestros hijos no hace falta aplicar ningún tipo de programa muy complejo, ni gastar dinero, ni comprar materiales sofisticados.

Hoy os traigo algunas actividades cotidianas que seguramente ya estáis haciendo sin ser conscientes de que eso también es estimulación. Cuando nos hacemos conscientes de ellos, simplemente prestaremos más atención a estos momentos y ayudaremos así a que el niño los aproveche mucho mejor.

Las edades (por meses) son orientativas. 
Siempre debemos observar al niño y adaptarnos a su evolución real, no a lo que los libros y los expertos digan que debe hacer en tal o cual mes de edad.



6-7 meses. Ofrecerle un juguete y animarle a cogerlo con la mano. Si no lo coge, se lo podemos poner en la mano para que entienda lo que pretendemos. Una vez que lo haga, podemos ofrecerle dos juguetes e intentar que coja uno con cada mano.


8-9 meses. Lo llamamos por su nombre desde atrás para que gire la cabeza. Esto puede hacerse desde mucho antes, para comprobar que oye bien pero, en ese caso, sin que gire la cabeza (porque aún no podrá si es muy pequeño) así que simplemente debemos observar si reacciona a las voces. No debemos irnos muy lejos porque hemos de hacernos visibles en cuanto comprobemos si reacciona o no.


10-11 meses. Animarle a meter y sacar objetos de una caja (por ejemplo, juguetes o ropa). Cuando ya lo haga con soltura, podemos usar cada vez una caja más pequeña y objetos más pequeños.


12-13 meses. Reproducir onomatopeyas para que nos imite. Por ejemplo, sonidos de animales, el ruido de un coche, una campana, etc.


14-15 meses. Intentar que se quite el gorro y los calcetines él sólo y también abrir y cerrar cremalleras (de la ropa, de bolsas, etc).


16-17 meses. Animarle a subir las escaleras él sólo, siempre con nosotros a su lado, muy cerca, para evitar accidentes.


18-19 meses. Si el niño muestra iniciativa, puede comer sólo y comenzar a utilizar los cubiertos. Evidentemente mucha comida se le caerá, se ensuciará y tardará mucho en terminar, pero será un gran aprendizaje para él.


20-21 meses. Comenzar a conocer y reconocer las partes del cuerpo humano: en su propio cuerpo, en el nuestro, en sus muñecos y, finalmente, en una imagen en papel.


22-23 meses. Contar cosas (peldaños, muñecos, galletas, dedos, amigos, etc). Si lo contamos todo en voz alta (señalándolo al principio) le estaremos introduciendo en las matemáticas y,s in darse cuenta, pronto estará sumando y restando.


24-25 meses. Si hacemos pan o repostería puede ayudarnos y moldear la pasta en diferentes formas y tamaños. Otra opción es hacerlo con plastelina o pasta de modelar (pero si lo hacemos con pan, después de lo podrá comer).


26-27 meses. Para ampliar su vocabulario y mejorar la expresión verbal, animarle a repetir palabras, hacer y contestar preguntas y entender instrucciones sencillas.


28-29 meses. Animarle a abrochar y desabrochar botones. Puede hacerlo en materiales específicamente preparados pero es mejor si lo hace en su ropa real (o en la nuestra o de sus muñecos).









Imagen: http://1m.babytuto.com/post/1396540569-shutterstock_51148012.jpg 






¿Qué otras actividades de estimulación temprana hay 
en vuestro día a día?










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Cómo fomentar la inteligencia lingüística en tu bebé


La inteligencia lingüística consiste en la capacidad de comunicarse mediante el lenguaje hablado y escrito. Hay muchas cosas que podemos hacer en el día a día para ayudar a nuestros hijos a desarrollarla:

1) Háblale mucho. Háblale aunque pienses que no puede entenderte. Cuéntale lo que haces, lo que ves, lo que piensas y lo que sientes.

2) Llama a las cosas por su nombre. No utilices un lenguaje infantil con el niño. No digas "baba" si puedes decir "agua", no digas "guau guau" si puedes decir "perro", etc. Conocí a una mujer que llamaba "cristalitos" a todo lo que era susceptible de romperse en pedazos. Unos años después tuvo que explicarle a su hija que no todo lo que se rompe es de cristal. Su hija no podía comprender cómo su madre la había engañado durante toda su vida. Porque para la niña eso había sido un engaño.

Imagen: https://www.etsy.com/listing/58924651/complete-alphabet-a-z-vintage-blocks
3) Pon voces cuando le cuentes historias o le leas en voz alta, le ayudarás a captar mejor los matices y las emociones.

4) Sigue las palabras con el dedo cuando le leas en voz alta. Poco a poco irá descubriendo que hay una relación entre esos símbolos escritos y lo que tú dices.

5) Haz juegos de palabras, como nombrar cosas que empiecen por la misma letra (y si están a la vista, mejor para empezar), hacer rimas sencillas, etc.

6) Pon letras y palabras a su alcance. Vivimos en una sociedad altamente alfabetizada en la que es imposible no estar en contacto con la palabra escrita, pero podemos ir un paso más allá y poner las letras al alcance del niño: letras imantadas en la nevera, letras grandes de madera para jugar con ellas, carteles con los nombres de las cosas sobre cada objeto de la casa, etc. Y, por supuesto, empieza por su nombre. Probablemente será la primera apalabra que será capaz de reconocer.


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miércoles, 6 de mayo de 2015

Una lección de Oprah


[Boletín Tarkus Kids de febrero 2015]




Oprah tuvo una infancia verdaderamente difícil. Su familia no tenía dinero, no había agua corriente en su casa y tenía que compartir la cama con su abuela. Con ese punto de partida, es difícil imagina cómo llego a ser quién es hoy en día: una de las mujeres más influyentes, más ricas y también más generosas del mundo.

Ella cuenta que una de las cosas que más fuerza le dio fue que no comenzó a ir a la escuela hasta los seis años. Antes de eso, su abuelo le enseñó a leer. Leían la Biblia. Así que cuando ella llegó a la escuela ya sabía leer y era capaz de deletrear palabras como “Nicodemo”, “Ananías, Misael y Azarías”. Así que fue una alumna aventajada, respetada por sus maestros y que, sobre todo, tenía mucha fe en si misma. Nunca se sintió inferior sino que se sentía muy inteligente precisamente porque ya sabía leer y leía bien.

Desde entonces siempre ha creído que era capaz de lograr cualquier cosa que se propusiera. Y así ha sido.

Uso este ejemplo para ilustrar la importancia de enseñar a los niños a leer, no sólo por el mero hecho de leer, sino por todos los efectos colaterales que ello provoca, empezando por el fortalecimiento de su autoestima y su visión de si mismos. Algo tan simple y gozoso como enseñar a un niño a leer puede cambiar para siempre su vida.






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miércoles, 29 de abril de 2015

Cómo dar conocimientos enciclopédicos a tu hijo




[Boletín Tarkus Kids de enero 2015]




Cuando hablamos de programas de estimulación temprana y de desarrollo de la inteligencia siempre insistimos en la idea de que el objetivo no es aprender a leer o memorizar todos los datos que estamos presentando. El objetivo es crear y fortalecer las conexiones neuronales que servirán de base de los futuros aprendizajes.



Sin embargo, no debemos perder de vista el hecho de que, además de ayudar a la creación de esas sinapsis (conexiones neuronales) también estamos aportando conocimientos al niño. Por tanto, es importante la manera en que lo hagamos. Los datos que enseñemos al niño deben cumplir estas características: 



Ser veraces. Habrá muchos otros momentos para estimular la imaginación y la creatividad, con historias fantásticas, inventando palabras, etc. Pero ahora estamos aportando conocimiento, por tanto, debemos enseñar cosas reales y ciertas. 

Ser precisos. Cuando enseñemos los bits de conocimientos enciclopédicos, debemos procurar que las imágenes sean fieles a la realidad, tan exactas como sea posible y con suficientes detalles para que sea distinguible de otras. 

Ser simples. O, como dice Glenn Doman, ser discretos. Es decir, que contenga un sólo elemento, referido a un sólo tema y sin información adicional. 

Ser nuevos. En principio, según Glenn Doman, las tarjetas que presentemos al niño deben contener información que él todavía no conozca para asegurarnos de que llame y mantenga su atención. Pero con algunos niños (especialmente a partir de los dos años) también funciona mostrarle algunos datos que ya conozcan. Por ejemplo, si su hijo ya conoce tres razas distintas de perros, nada impide que las incluya entre sus tarjetas sobre razas de perros. 

Ser atractiva y fácil de ver. El Dr. Kovacs añade esta característica al listado, aunque incluye en ella ser “llamativa, nueva y grande”. En realidad es sólo otra forma de expresar lo mismo que recomienda Doman: que sea nueva y tenga el tamaño adecuado, además de no contener elementos adicionales, hace que sea llamativa para el niño. 









Imagen: http://www.iahp.org/wp-content/uploads/2014/06/Mom.child_.Bit-copy-1170x500.jpg 




Los humanos construimos el conocimiento sobre nuestros conocimientos previos, así los aprendizajes se suceden en una cadena que nunca acaba y que, para muchos, empezó con los programas de estimulación temprana y, especialmente, con el programa de conocimientos enciclopédicos. Así que elija bien la información que va a presentar a su hijo, porque está sentando las bases de su futuro aprendizaje





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miércoles, 22 de abril de 2015

Cómo fomentar la sensibilidad artística

[Boletín Tarkus Kids de enero 2015]

Mariluz me escribió el siguiente comentario: "Mi marido y yo somos de ciencias y siempre hemos sido muy racionales. No nos consideramos personas creativas ni con habilidades artísticas y nos preocupa que nuestro hijo tampoco lo sea. ¿Qué nos recomiendas para fomentar su sensibilidad artística?"

Yo les contesté y también les pedí permiso para compartir su mensaje porque creo que la respuesta puede servir a otras familias.

Si tu hijo aún no ha nacido puedes comenzar su estimulación mediante las audiciones musicales. Se ha comprobado que el niño en el útero materno es capaz de oír los sonidos del exterior y, después de nacer, puede reconocer la música que su madre escuchó. Oyen mejor los sonidos de más de 1500 Hz, por lo que la música clásica y el canto gregoriano son los más recomendados. Es bueno que esas audiciones continúen después de nacer.

Siguiendo con la música, si es posible conviene poner a su disposición instrumentos musicales (no imitaciones de plástico diseñadas para niños, sino instrumentos de verdad) y dejarles experimentar con ellos enseñándoles también a cuidarlos y respetarlos, por supuesto, pero sin imponerles una forma determinada de usarlos y de combinar los sonidos. A partir de cierta edad (5 o 6 años, aproximadamente, pero siempre va a depender de cada niño) puede tomar clases de solfeo y del instrumento que sea de su interés, pero hay que cuidar que no lo vea como algo tedioso y que se le permita improvisar y experimentar.

Antes de que su desarrollo motor le permita coger un lápiz, el niño puede pintar usando sus propias manos, en papeles que estén sobre una mesa, sobre el suelo o pegados a la pared. Cuando empiece a dibujar, nuestra actitud va a determinar que su creatividad fluya o que se coarte. éstas son algunas cosas que debemos hacer:

-No obligarle nunca a dibujar ni a colorear. Hay niños que no quieren dibujar y hay niños que dibujan pero tardan mucho en colorear. Eso no significa que tengan algún problema; lo mejor, siempre, es respetar sus ritmos.

-No tratar de interpretar sus dibujos. Si el niños nos quiere contar qué es lo que ha dibujado, le escuchamos y conversamos con él, pero no intentamos adivinar qué dibujó ni mucho menos qué significan sus dibujos.

-Permitir que se manche. Es bueno que el niño dibuje con herramientas diferentes y sobre superficies variadas así como mezclar los colores a su antojo sin que limitemos su expresión por el miedo a que manche su ropa, la mesa o el suelo. Hay pinturas fácilmente lavables.

-No decirle qué debe dibujar a menos que él nos lo pregunte. Hay dibujos que son abstractos, que son sólo una mezcla de trazos sin significado. No hay que corregirle si él no lo pide.

-No exponer los dibujos en la casa si el niño no quiere. A las madres nos gusta poner los dibujos de los niños en las paredes de casa y en la puerta de la nevera, pero algunos niños no quieren, o quieren elegir ellos qué dibujos van a exponerse y dónde.

Sin duda lo más importante, en el caso de Mariluz y tanta gente que opina como ella, es cambiar la actitud y dejar de creer que la sensibilidad artística es un don que sólo algunos poseen. Todos somos creativos y somos capaces de desarrollar esa faceta de nuestra personalidad. Los niños, con su frescura y su ausencia de prejuicios, son los maestros perfectos para que también los adultos aprendamos a desarrollar nuestra sensibilidad artística.


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miércoles, 15 de abril de 2015

El orden lógico de la estimulación temprana



[Boletín Tarkus Kids de enero 2015]


Hoy quiero comentar un tema muy importante sobre la estimulación temprana.


Hay algunas creencias erróneas sobre esto, como la que asegura que es como abrigarse antes de que llueva, que se pretende forzar el desarrollo del niño y que es inútil hacerlo


Pero todo tiene una explicación. En el caso de la estimulación temprana, sólo podremos comprender (y por tanto, hacerlo bien) si conocemos cuál es el funcionamiento del cerebro y, sobre todo, su proceso de formación.


Siempre que vayamos a utilizar algún programa de estimulación temprana con nuestros hijos debemos tener en cuenta su edad pero, sobre todo, el grado de desarrollo y madurez de su cerebro.



En el cerebro humano existen tres tipos de áreas que tienen funciones diferentes: las primarias, perciben los estímulos; las secundarias los identifican y las terciarias los relacionan. Además, es sabido que las estructuras simples del cerebro maduran antes que las complejas, por lo que los estímulos que proporcionemos al niño deben ser acordes a su proceso de maduración y crecimiento. No sirve de nada proporcionar estímulos dirigidos a las áreas secundarias si éstas aún no se han desarrollado, igual que no sirve de nada tirar de una planta para que crezca más y más rápido. 


En un primer momento (es decir, en los primeros meses de vida e incluso antes del nacimiento) la estimulación debe ser únicamente sensorial. 


En estos meses, las áreas del cerebro que funcionan son las primarias, las que perciben los estímulos, así que de nada serviría proporcionar estímulos dirigidos a las otras áreas. Lo órganos sensoriales captan esos estímulos y los traducen en impulsos eléctricos que llegan hasta el cerebro. Se trata de la función primaria de percepción para ello el niño utiliza los cinco sentidos. Más adelante, las áreas secundarias permitirán su identificación y, finalmente, las terciarias cumplirán la función más compleja, que es la de relación. Así que nuestro programa de estimulación debe seguir ese mismo esquema para que sea eficaz. 







Es importante también estimular el sentido del equilibrio, ya que ello repercutirá favorablemente en el posterior desarrollo de la motricidad del niño. A partir del sexto mes de embarazo comienza a funcionar el oído interno, responsable del equilibrio, por lo que los movimientos de la madre van a servir para estimular ese sentido. Después del nacimiento, mecer al niño, acunarlo, levantarlo, etc, son también ejercicios que fomentarán su equilibrio y el desarrollo motor. Estos movimientos deben hacerse siempre con suavidad y progresivamente para evitar causarle mareos o daños al niño. 


En un patrón de desarrollo sano, un niño de dos meses comenzará a reptar; uno de siete a gatear, y uno de 12 a caminar con ayuda. Como siempre, las edades son orientativas y dependen de la madurez de su cerebro. 


Y tú ¿has estimulado a tus hijos? Cuéntanos cómo lo hiciste en lau@tarkuskids.com 












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miércoles, 18 de marzo de 2015

El proyecto Abecedarian





El Proyecto Abecedarian fue desarrollado en la década de los años 70 por un grupo de psicólogos que buscaban una forma de romper el círculo vicioso que relaciona la pobreza con los bajos resultados académicos y menores oportunidades de desarrollarse profesionalmente. 

Eligieron a 111 niños de barrios marginales, algunos hijos de madres adolescentes, y les ofrecieron un programa de estimulación temprana. 

Para ello, diseñaron 200 juegos educativos que para los niños eran simplemente eso, juegos divertidos, pero que cada uno de ellos tenía un propósito muy concreto. Cada juego se enfocaba en un área de desarrollo social, cognitivo o emocional con especial énfasis en el lenguaje.

Aunque el probable incremento de su cociente intelectual no era un objetivo del programa, se realizaron tests para compararlos con una muestra de niños que no habían sido expuestos a ningún programa de estimulación temprana. En los primeros meses de vida, no había diferencia alguna entre ellos pero, a partir de los 15 meses de edad, comenzaron a mostrarse las diferencias. Los niños del proyecto Abecedarian veían el mundo de un modo diferente, aprendían más rápido, tenían un lenguaje más fluido y tenían un CI superior al de los niños no estimulados. A los dos años la diferencia ya era sustancial, lo que les llevó a concluir que se ha de estimular a los niños mucho antes de que cumplan los tres años.

Se les hizo un seguimiento a los 12 años, a los 15 y a los 21, y se concluyó que los beneficios conseguidos a largo plazo estaban relacionados con los programas de estimulación temprana.


Conclusiones del estudio

Los niños que participaron en el programa de estimulación temprana tuvieron mejores resultados en los tests de inteligencia desde la infancia hasta los 21 años de edad.

El desempeño académico en lectura y matemáticas fue mayor desde la educación primaria hasta la edad adulta.

Los niños del programa completaron más años de educación formal y en su mayoría lograron diplomas universitarios.

Tuvieron a sus primer hijo a una edad mayor que la media.

Las madres de los niños que participaron en el programa lograron mayor nivel educativo y profesional que las madres de los niños que no estaban en el programa. Estos resultados fueron especialmente destacados en las madres adolescentes.



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lunes, 16 de febrero de 2015

7 formas de multiplicar la inteligencia de tu bebé




[Boletín Tarkus Kids de diciembre 2014]




El cerebro es uno de los órganos más complejos y más importantes del cuerpo humano. Sabemos que, cuanto más joven es la persona, mayor plasticidad tiene el cerebro. Eso significa que es capaz de adaptarse y regenerarse en función de los estímulos que reciba. Con la estimulación adecuada, el cerebro del niño es capaz de crear una gran cantidad de nuevas sinapsis (conexiones entre neuronas) y de fortalecer las que ya existen. No olvidemos que el cerebro funciona como una red y es importante hacerla crecer y fortalecerla igual que hacemos con el resto del cuerpo. Si cuidamos nuestra alimentación y hacemos ejercicio físico para mantener el cuerpo en buen estado de salud, ¿por qué no habríamos de hacer lo mismo por el cerebro? Y si así lo hacemos, ¿por qué no empezar desde que nuestros hijos nacen?



Estimular la inteligencia de los niños es muy sencillo; no requiere conocimientos específicos ni comprar ningún tipo de producto. Éstas son 7 cosas que puedas hacer desde hoy mismo:



1-Háblale todo el tiempo. Aunque tu hijo sea un bebé y no sea capaz de comunicarse verbalmente, háblale. Cuéntale qué estás haciendo, qué piensas, qué sientes, etc. Fortalecerás tu vínculo con él sólo por permitirle escuchar tu voz pero, además, le facilitarás la adquisición del vocabulario cuando sea el momento.



2-Cuéntalo todo. Su primer acercamiento a las matemáticas puede ser éste: que te escuche y te vea contando todo lo que esté a tu alcance. Los peldaños de la escalera cuando subes o bajas, los dedos de sus manos, las cucharadas que come o los muñecos que tiene, por ejemplo.



3-Pasea por distintos lugares. Si para los adultos es muy recomendable viajar, el equivalente para un bebé puede ser simplemente estar en distintos lugares y estar en movimiento. Salir a la calle, entrar en un mercado (lleno de colores, olores y sonidos), ir a la playa o a la montaña, entrar a una iglesia.



4-Permítele explorar el entorno. Deja que toque cosas, que se las lleve a la boca (siempre cuidando su seguridad, obviamente), que se mueva libremente desde que sea capaz de desplazarse por si mismo arrastrándose o gateando. El único límite debe ser su propia seguridad.



5-Fomenta la actividad física. Glenn Doman solía decir que cualquier programa de inteligencia debe complementarse con un programa físico. Como estamos estimulando la inteligencia de nuestro hijo, debemos también prestar atención a su actividad física. Comenzando por darle masajes desde el nacimiento y permitiéndole (y animándole) después a correr, saltar, braquear, nadar, etc.



6-Léele en voz alta. Ésta es una de las herramientas más potentes para multiplicar la inteligencia de los niños. Más sobre el tema en nuestro blog.



7-Cántale. Por lo mismo que es importante verbalizar nuestros pensamientos y que le niño oiga nuestra voz, hacerlo cantando es muy efectivo también para modular sus emociones. Podemos transmitirle serenidad, tranquilidad y alegría con nuestros cantos.





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lunes, 9 de febrero de 2015

Tips para estimular a tu recién nacido




[Boletín Tarkus Kids de diciembre 2014]




Muchos me habéis escrito preguntándome qué cosas podemos hacer para ayudar al desarrollo de la inteligencia desde que el bebé nace. Sabemos que el entorno y los estímulos son fundamentales para el desarrollo del cerebro, no sólo la genética.



Cuando el niño nace, viene equipado con cinco potentes herramientas que le permiten explorar el mundo que le rodea: los cinco sentidos. Este es, por tanto, el cauce que debemos utilizar si queremos fomentar, desde el momento mismo del nacimiento, la formación del cerebro. Éste es una estructura relacional, no es un órgano compuesto por compartimentos estancos, cada uno con una función y donde se almacena la información separadamente, sino que se crea una enorme red de conexiones que podemos ayudar a crear y a fortalecer.



Veamos algunas ideas en función del sentido que vayamos a utilizar:



Tacto: el contacto piel con piel del bebé con la madre es fundamental en las primeras semanas de vida. Tenerle cerca siempre le va a dar la seguridad que requiere. Podemos potearle y también se le pueden dar masajes.



Olfato: aquí también juega un papel esencial la cercanía con otros cuerpos, principalmente el de la madre y, muy especialmente, la lactancia materna. Podemos usar aceites esenciales de olores suaves en los masajes.



Gusto: aunque el sentido del gusto no puede estimularse hasta el nacimiento, algunos estudios indican que se forma desde el tercer mes del embarazo. Además, una dieta variada en la madre hará que el gusto del lactante comience acostumbrarse a diferentes sabores con los que ya podrá experimentar de forma directa a partir de los dos años o un poco antes.



Vista: los recién nacidos son muy sensibles a la luz y los brillos, por lo que debemos ser cuidadosos con las cosas que ponemos a su alcance. La mejor forma de estimular su visión es sacándole a pasear para que pueda ver todo el entorno y eligiendo cuidadosamente la decoración de las zonas de la casa donde vaya a pasar más tiempo, sin estridencias ni sobrecarga de formas y colores.



Oído: el oído es quizás el sentido para el que tenemos más opciones con un recién nacido. Podemos hablarle y cantarle desde antes del nacimiento y después, además, acercarlo para que escuche el latido de nuestro corazón. Es recomendable también la música clásica y el canto gregoriano.



A medida que el niño vaya creciendo tendremos muchas más oportunidades de estimular su desarrollo y él mismo nos va a indicar cuáles son sus preferencias.





Espero vuestros comentarios, como siempre, en el blog, en Facebook y por email a lau@tarkuskids.com






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viernes, 6 de febrero de 2015

miércoles, 4 de febrero de 2015

Aprende a leer con Kumon lectura




La semana pasada participé en un encuentro de mamás blogueras organizado por Kumon España en el que nos presentaron su programa de lectura, que ya tiene bastantes años en japonés e inglés pero es bastante nuevo en español.

Participaron:


Todas contamos cómo habíamos aprendido a leer y cómo aprendían nuestros hijos. Coincidimos en que las dos claves son: el juego (que el aprendizaje sea divertido) y la conexión con la realidad (porque si el niño no ve una utilidad práctica a lo que está estudiando, su motivación va a ser baja).

Igual que el método Kumon de matemáticas, Kumon lectura es un método de aprendizaje individualizado que pretende dotar a los alumnos de herramientas, capacidades y habilidades para desempeñarse en la vida. Se fomenta el autodidactismo, la concentración, el hábito de estudio y la automotivación para aprender.

El programa de lectura utiliza un enfoque global y se centra en la comprensión lectora, no en la gramática. Se empieza trabajando con palabras y oraciones simples repitiendo, recitando y leyendo con el apoyo de ilustraciones. Finaliza con la lectura crítica de textos más complejos.

Todos los centros Kumon de España ofrecen 15 días de prueba en septiembre/octubre y en enero/febrero. Encuentra tu centro en http://www.kumon.es/



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