lunes, 1 de septiembre de 2014

¿Estimular o no estimular? - Por Etna Hernández






Etna Hernández es madre de dos pequeños a los que ha aplicado Estimulación Temprana, y actualmente continua educando y estimulando. Es profesora, músico profesional, y asesora a madres  con temas como Estimulación Temprana, Crianza, Educación, Planificación Estratégica y Organización de estudios.

Su trabajo actual en la red incluye, escribir en el Blog: Sembrar Estrellas, Asesorías Personalizadas para madres: Asesoría Estrella y su Programa de Membresía: "Crea tu organizador de estudios y libérate de enfados y reproches"

Próximamente, hará el lanzamiento de su programa AprendeMate (para más información suscríbase a su Boletín de noticias).


¿Estimular o no estimular? 




Llevo leyendo y escuchando diversas opiniones sobre este tema, y normalmente los bandos están muy divididos y son opuestos como el día y la noche. Cuesta encontrar el término medio, o debatir sin que se caliente la conversación, pues normalmente los padres o madres están posicionados en una orilla y consideran a los de la otra orilla como los malos de la película.

Personalmente sigo aprendiendo cada día… pero después de dos niños completamente diferentes, de un gran grupo de amigos y conocidos (también muy diferentes entre sí), con niños estimulados (y resultados varios) y otro montón que no han estimulado para nada (o al menos eso creen ellos) espero poder lanzar un poco de luz sobre este asunto, o al menos mostrarles aquello que he aprendido yo. 






Y lo que es más importante para mí, espero poder ayudar a otras madres así como me ayudaron a mí.




Al hablar de este tema, aparecen siempre muchos detractores de los programas de estimulación temprana, así que, si solo sabes lo que has escuchado (y eso te hace estar en contra… o incluso si te hace estar a favor) te recomiendo la lectura de los libros para que conozcan la filosofía de dichos métodos. 


Mis palabras podrán gustarte más o menos, pero lo mejor es buscar la raíz, la base de toda esta metodología… y más aun si pretendes aplicarla. 

Piensa, que mas que las dudas que pueda solventarte cualquier madre, o el debate que pueda surgir ante criticas, o inquietudes, los libros de autores como Doman o Nikití, develan un respeto total hacia los niños y sus tiempos, así como también refuerzan el papel de los padres como criadores-educadores-instructores.


Yo, personalmente, cada vez que veo estos debates con madres y padres a favor o en contra de los métodos de estimulación temprana, me hago siempre las mismas preguntas. 

¿Cuándo es demasiado temprano para aprender?
¿Con que base se afirma que enseñar a leer o a contar con esta u otra edad, es presionar?
¿Por qué enseñar el lenguaje oral no es estimular el aprendizaje, y enseñar a leer si?

Por otra parte, me surgen unas cuantas preguntas más:

Partiendo del principio del respeto al niño y sus tiempos, que aboga porque todos somos diferentes ¿Cómo podemos identificar cual es el momento óptimo para que nuestro pequeño aprenda conceptos de cantidades, sumas, notación musical, etc.?
¿Por qué NO es temprano, empezar a enseñar a leer a un niño cuando tiene 6 años, o 3 años, o 10 años? 
¿Por qué es mejor esperar a que aprendan en la escuela determinadas cosas y otras no?

Todos los niños quieren aprender. Lo demuestran, lo disfrutan, lo piden.

Limitar y presionar (u obligar) son dos caras de la misma moneda ¿no creen? Tan malo es caer en la una, como en la otra.


Pero estimular es otra cosa.


En mi opinión la estimulación a cualquier edad es lo que lleva al aprendizaje. Y esta, llamada “temprana”, lleva este nombre simplemente porque se sale de la edad en que comúnmente se le enseña a los niños de una forma estructurada (entiéndase estructurada según lo ven los padres, porque para ellos es solo un juego) determinadas cosas. 


¿Por qué ver la palabra “Estimulación” como algo perjudicial, si todos estamos ligados a ella?

Porque, estimulación es esa interacción con las cosas que nos rodean, eso que hace despertar la curiosidad, eso que no para desde que naces hasta que mueres… y no está limitada solo al periodo infantil. 


Desgraciadamente no siempre se tienen la posibilidad de interactuar con el material original (me refiero a cosas como, un telescopio para ver los planetas, o un determinado animal o planta cerca de casa) por lo que tenemos que recurrir (al igual que en la escuela) a tarjetas con imágenes (entre otras cosas, pues también están aprendiendo de todas aquellas cosas que tenemos a nuestro alcance) para que puedan descubrir toda la amplitud de este, nuestro mundo. O por lo menos empezar a escuchar las palabras y los nombres que lo definen.


¿Qué crees tú de la Estimulación Temprana? 


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